El agua volvió a la tierra en meteoritos y a la luna en cometa
Galería Die Ecke - 2017
MAIPO - CATASTROS DE AGUA / 2016 - 2015
Dos circuitos de agua, uno en base al Río Maipo y otro en base a la Ría del Nervión. Ambos sistematizados con arduinos y válvulas solenoides, que activan una bomba de agua que permite que el fluido suba a un bidón de descarga, que al cortar la bomba abre el paso de la válvula solenoide y cae el agua por gravedad, hasta el bidón receptor. Fabricadas con piezas de cerámica moldeadas y madera cortada mediante CNC Router.
EJERCICIOS VARIABLES, 2017
4 piezas de cerámica y cobre, para sistema de agua manual. 1,50x70x1,20 m.
METEORITO, 2016
Piedra volcánica, cámara de seguridad, circuito cerrado, proyección
La muestra estudia el movimiento del agua como medida de tiempo, en donde la artista elabora circuitos de cañerías de cerámica por donde el fluido desciende por gravedad, imprimiendo con su paso la loza y calculando el tiempo de declive y de reposición, de una cierta cantidad de litros.
Estas estructuras compuestas de tuberías de carácter tipo maqueta, responden formalmente a representaciones de mapas hidrográficos, en este caso el Río Maipo y sus afluentes. Aquí los flujos de agua decantan por los afluentes de loza, irrigando con mayor o menor caudal según la pendiente y sus ramificaciones, desaguando finalmente en recipientes de uso doméstico, para retornar a las cañerías mediante un sistema de bombas de agua y mangueras, controlado por arduinos y válvulas solenoides.
Junto a lo anterior, la muestra se compone por una serie de fotografías con imágenes bajo el agua, que muestran el límite entre el medio acuático y el aire, impresas con tecnología chromalux realizadas en el País Vasco, las que dialogan con piedras volcánicas que orbitan entre proyecciones de sombras y fluidos. Todos estos elementos son tensionados cromáticamente con el video “nadie puede empujar el río”. Este último fue filmado con una cámara waterproof en diferentes lugares del Océano Pacífico y el Océano Atlántico entre los años 2014-2016. Las imágenes de este vídeo están unidas mediante diferentes tonalidades de agua, mostrando su entorno terrestre en breves segundos, únicamente cuando la cámara sale a superficie y nos devuelve a la tierra. De esta manera, el video busca desestabilizar el espacio terrenal para mostrar que el planeta se encuentra unido por sus océanos y que el agua está condicionada por una fuerza magnética y una atracción planetaria, que altera o condiciona nuestra naturaleza y paisaje.