La investigación se basó en un trabajo de campo en base a la observación y recolección de material leñoso muerto, especificamente del bosque esclerófilo. Se recolectaron especies notofagus de Raulí, Coihue, Roble, y Quila. A estas ramas de árboles caídos se les hizo molde directo de cerámica, a modo de capturar en el material su inclinación, grosor, y forma. La pieza de cerámica (por error) se quemó a mayor temperatura en el horno y sufrió algunas modificaciones, pero igualmente permitió montarla debajo de un gran Roble que se encuentra aledaño a la casa. La rama de cerámica cóncava se colgó de una rama viva, la cual cobijará la instalación. También se colocó una camara trampa cercana a la pieza, a modo de visualizar su comportamiento con el clima, la lluvia y la nieve.  

Paralelamente se firmó con cámara waterproof las aguas de bosque Pehuén, encontrando un bosque sumergido en una pequeña laguna azul mantenida con agua, por ser una quebrada. Esta laguna se ilumina al medio día -por el sol- tornándose todo de un azul turquesa. La camara filmó un espacio congelado en medio del agua limpia, una segunda atmósfera luego de la terrestre, entregada por un ambiente acuoso. 

Paralelamente se grabó sonido con un hidrófono, como apoyo sonoro para montaje de video.